La inseminación artificial (IA) es la recolección manual de semen y la colocación del semen en el tracto reproductivo de la hembra por un método distinto al apareamiento natural. Durante el proceso, el semen ha sido inspeccionado estrictamente para asegurar su calidad. La IA permite la reproducción entre animales en diferentes ubicaciones geográficas o en diferentes momentos. Además, la productividad puede aumentar al utilizar semen de machos con alto mérito genético para hembras superiores. Debido al aumento en la eficiencia reproductiva, el costo de la cría de ganado macho puede disminuir al reducir la cantidad de animales criados. (Para saber más, existen cinco formas de mejorar la productividad porcina).
Las frecuencias de recolección de semen y los métodos de conservación varían de una especie a otra. Los toros pueden producir 10 mil millones de espermatozoides diariamente, y pueden eyacular alrededor de 5 a 10 mil millones de espermatozoides cada vez. Por lo tanto, el semen de toros en buenas condiciones de alimentación puede recolectarse cada dos días. Para la conservación del semen de toro, el recipiente debe ser un contenedor aislado con aislamiento al vacío y llenado con nitrógeno líquido, que conserva las dosis de semen congelado a una temperatura de -196℃.
Los equinos pueden eyacular alrededor de 5 mil millones de espermatozoides cada vez, y su semen se recolecta tres veces por semana. El semen equino puede almacenarse a 5℃, y la fertilidad del semen refrigerado se mantiene durante aproximadamente 24 horas. El semen equino congelado se utiliza con poca frecuencia. Los cerdos pueden eyacular entre 100 y 300 millones de espermatozoides cada vez; por lo general, su semen se recolecta de dos a cinco veces por semana. El semen porcino puede almacenarse a 15℃, y la fertilidad del semen refrigerado se mantiene durante 2 días.
Además del desarrollo de la tecnología de almacenamiento de semen, la calidad del diluyente de semen también es un punto clave en la inseminación artificial. Un buen diluyente de semen debe proporcionar nutrientes, proteger las células espermáticas del shock térmico y osmótico durante el proceso de enfriamiento y envío, e inhibir el crecimiento bacteriano. 1 ml de semen original de un toro puede diluirse hasta 65 veces su volumen. El semen equino puede diluirse hasta 40 veces, mientras que el semen porcino puede diluirse hasta 40 veces.
Antes y después de la dilución, la concentración y la motilidad del semen deben medirse para asegurar que el esperma se utilice de manera efectiva. Además de utilizar herramientas bien establecidas, como los sistemas CASA (análisis de esperma asistido por computadora) o el fotómetro para analizar la calidad del esperma, el analizador iSperm (Aidmics Biotechnology) puede analizar la morfología, concentración y motilidad del esperma directamente en un iPad mini. iSperm es fácil de usar y requiere de un entrenamiento mínimo. Con iSperm, los criadores ahora pueden verificar la calidad del semen en cualquier momento durante el proceso de inseminación artificial, según sea necesario.
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